Terapia de cuarzos

Terapia de cuarzos
Los cuarzos conectan con la esencia divina. Influyen en la salud física, mental, emocional y de palabra.
Yo no imagino mi vida sin la conexión íntima y el acompañamiento que los cuarzos y yo hemos tenido, no sólo a lo largo de esta vida sino de muchas otras anteriores.
Los cuarzos transmutan, reconectan, energizan, apoyan en la recuperación de recuerdos; ellos nos hablan en un lenguaje íntimo, amoroso y sincero.
Los cuarzos son tan nobles y poseen información acumulada por cientos, miles y hasta millones de años, razones por las cuales los vemos como nuestros maestros en sabiduría ancestral, así que nos reconectan con nuestras raíces, nos ayudan en la toma de refugio para sentirnos más cómodos con el mundo y con nosotros mismos.
Su estructura, composición y color los hacen poseedores de códigos de información única y especializada. Ellos se enlazan con el ADN, con las zonas neuronales y trabajan tanto en niveles sutiles como físicos.
Apoyan en la revisión, apalancamiento o remoción de sistemas de creencias, según sea el caso.
En mi larga experiencia he encontrado que muchas veces cuando se sienten desajustes que la medicina no logra identificar, es porque se está acumulando energía en el campo etéreo, que si no se moviliza a tiempo puede derivar en una afectación física.
Los cuarzos activan, sedan, liberan, fortalecen, apoyan amorosamente en recuperaciones de todo tipo, tanto físico, mental, emocional como de palabra.
Técnica
Las sesiones duran aproximadamente 40 minutos y en ellas se te invita a que, tendido (a) sobre una camilla e inducido (a) a estados de relajación, se te hace (en principio) un escáner para revisar tus centros energéticos conocidos como chakras, órganos, sistemas, tejidos, etc., los cuales se miden a todos los niveles áuricos.
En seguida, se te practica un barrido energético que incluye la extracción de energía negativa, y movilización de energía estancada.
Después, se te realiza un nuevo escaneo para liberación y/o corrección de corrientes energéticas y corrientes etéreas de órganos, tejidos, sistemas, etc.; para terminar con energización y cierre aúrico.
Al finalizar, te sientes alegre, positivo, vital, pacífico, con sentido de liviandad, responsabilidad espiritual, energía y percepción positivizada.

Liliana López
Terapia Vibracional
